Como si fuera un contador, llegó la hora de hacer un balance del año deportivo.El mismo arrancó con un desafío creado por mí: El Capitlon. ¿Como lo concebí?
Algo que me seduce a la hora de pensar en ultramaraton es que este sea de un punto a otro, como lo es por ejemplo cualquier maraton de ciudad o las ultras de montaña. La idea de no tener que darle vueltas a un circuito cerrado, ya sea en pista de 400 m o los de ruta que son de 1 km o 5 km hace que la experiencia sea mas llevadera y divertida.
En marzo junto a un par de amigos -Bugge, Cruz y la Vargas - hicimos realidad esta loca aventura. El punto de encuentro fue la puerta de mi casa, en Caballito y de ahí pasando, por Paternal ,Palermo y Belgrano enfilamos hacia Tigre (ahí fue el km 45). Luego retomamos y volvimos para capital pasando por Nuñez, de vuelta Palermo y regreso a Caballito . Aquella vez el recorrido total fue de 80 km, pero la idea y la meta para marzo de 2015 es llegar a los 100 km agregando recorrido por el microcentro porteño , Puerto Madero y un par de barrios mas.
A fin de Junio viajé a Rosario para competir en los 42 k de dicha ciudad. Ni bien llegué fui recibido por el gran Fabian Duarte el cual me alojó un rato en su depto donde almorcé una ricas milangas con unos tomates.
En la entrega de kits me encontré con un par de ultras que iban a hacer de liebres en la carrera: Martin Cordoba, Gerardo Re, Leo Bugge y tambien Duarte.
Justamente Leo, era la "liebre" indicada para poder hacer la carrera que tenía en mente. Lo pude seguir hasta el km 34 despues de ahí baje un poco el ritmo, no obstante, logré mi mejor marca en maraton hasta el momento ( 3 hs 56 min 10 seg). Después de la carrera fui a San Nicolas a visitar a Arnoldo Papa, mi sensei y héroe en este lío.
En octubre llegó el turno de los 42 k de mi ciudad. Ahi no tuve una buena carrera en cuanto a tiempo pero como experiencia no dejó de sumar.
Y cerrando el 2014 corrí las 12 hs en pista de Villa Elisa, en el parque Ecológico. Ahí pude resarcirme , recorrí 98,4 km y clavar mi mejor ultra hasta el momento.
Frodo Bolson, en la película del Señor de los Anillos, tuvo que dirigirse con su amigo Sam al monte del Destino para arrojar el anillo allí y destruirlo, logrando con eso acabar con el dominio de Sauron lo que le permitió salvar el Mundo Medio.
En mi caso no tengo que destruir nada, pero haciendo una analogía con esta gran saga, mi monte del Destino es -siendo redundante con el nombre de este blog- la ciudad de Sparta.
El camino a recorrer es largo y sinuoso, con muchas dificultades, pero si fuera fácil el sabor de lo logrado no sería tan dulce ,no?
La meta para el año que viene es poder clasificar para esa dura carrera en Grecia y acercarme mas al final de mi saga. Brindo por eso! Feliz 2015!
