viernes, 3 de octubre de 2014

Sin límites

Una de las cosas que diferencia a los grandes corredores, los que pasan a ser leyendas con respecto al resto de los mortales que corremos, es la tenacidad que vuelcan al deporte en cuestión.
Steve "Pre" Prefontaine fue un claro ejemplo. Este atleta estadounidense fue especialista en carreras de fondo y medio fondo que compitió en los Juegos Olimpicos de Munich 1972.
Era un tipo engreído,carismático y duro, que desafió las reglas, extremó los límites y derribó récords para transformarse en uno de los mas grandes corredores de larga distancia de la historia. Tenía como característica personal su melena y espeso bigote. Murió a los 24 años en un accidente automovilístico.
Se hicieron un par de películas contando su vida deportiva . Una de ellas -que es la única que vi- se llama  "Sin Llimites" , protagonizada por el genial Donald Sutherland en la cual hace de entrenador del gran "Pre". Sobre el final de la misma, luego del accidente de auto que acabara al instante con la vida del corredor, Bill Bowerman (quien sería uno de los primeros inversores de Nike) nos regala este discurso de despedida. No tiene desperdicio:

"Toda mi vida, de muchacho y adulto, he obrado asumiendo que, en esto de correr, lo principal es ganar la maldita carrera. Al hacerme entrenador, he tratado de enseñar a la gente como lograrlo. Traté de enseñarle a "Pré" como hacerlo.Yo traté endemoniadamente, de enseñar a Pre como hacerlo. Y "Pré" me enseñó a mí que yo estaba equivocado.A él le molestaba saber que un mediocre esfuerzo pueda ganar una carrera y un magnífico esfuerzo pueda perderla. Para "Pre" implicaba dar todo desde la linea de salida hasta la de llegada.Nunca corría de otra forma.Yo traté de cambiarlo, pero "Pré" era obstinado. Él insistia en mantenerse a un mas alto nivel que la mera victoria. Una carrera es una obra de arte.Eso es lo que me decía.En eso es en lo que creía y fue capaz de ponerlo en práctica en cada paso de su camino. Desde luego,tambien quería ganar.Aquellos quienes lo vieron competir y quienes compitieron contra él nunca tuvieron duda de cuanto le gustaba ganar. Pero el cómo lo hacía le importaba mucho mas. "Pré" pensaba que yo era un caso dificil pero finalmente logró meterme en la cabeza que el auténtico propósito de correr no es ganar la carrera,es probar los límites del corazon humano.Y él lo hizo, nadie lo hizo tanto ni nadie lo hizo mejor."





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